Este proyecto tenía como objetivo, redistribuir y rediseñar las oficinas privadas, comunes, incorporar cafeterías como espacios de encuentro entre las distintas áreas de la Corredora de bolsa, darle una nueva acogida a la recepción, baños y salas de reuniones según las necesidades por parte del mandante y exigencias regulatorias.

La superficie total a intervenir era de 838,10 m2, sin embargo, el proyecto se desarrolló por etapas.

En términos generales, se planteó un diseño por zonas considerando el uso flexible de estos, por lo que el diseño de iluminación y de mobiliarios era parte del dinamismo que debía tener el uso de las oficinas.